DEPRESIÓN POST-PARTO

 Depresión Postparto.

La depresión postparto consiste en el desarrollo de una depresión
en la madre tras el nacimiento de su hijo.                                     
A veces, esta depresión puede tener una fácil explicación, bien  
porque el hijo no ha sido deseado o porque no es normal. Sin embargo,
en la mayoría de las ocasiones la depresión parece no tener sentido.
Revisemos estas preguntas frecuentes:
1.- " Deseaba tanto tener este hijo y ahora que lo tengo me
       siento completamente desdichada"
2.- "¿Qué me está pasando?"
 3.-"El parto fue magnífico, mucho mejor de lo que esperaba,
     y todo el mundo se portó maravillosamente conmigo,
      especialmente mi marido. Yo debería dar saltos de alegría"
4.- "Tenía miedo que el bebé tuviera algún defecto al nacer,
         pero es perfecto"
5.-" Entonces, ¿Porqué no lo estoy disfrutando?
 6.-Quizás no valgo para ser madre".

Estas mujeres no son unas desagradecidas o unas malas madres sino que
 están experimentando una de las complicaciones más frecuentes del parto,
la depresión postparto, un trastorno que todavía sufren en silencio un gran
 número de mujeres.
Cuál es la frecuencia?
La depresión postparto es una de las enfermedades más frecuentes tras
 el parto ya que afecta a una de cada diez parturientas.
Si no se trata adecuadamente puede persistir durante meses
 e incluso años.
SINTOMAS:
Tristeza
La tristeza es desde luego el síntoma más frecuente de la depresión
postparto.
Las pacientes se sienten bajas de ánimo, infelices y
desgraciadas la mayor parte del tiempo aunque estos síntomas
 pueden empeorar en algún momento particular del día, como por
las mañanas o por las tardes.
En ocasiones, las pacientes pasan días malos y días buenos, siendo
estos últimos realmente frustrantes ya que el día bueno previo hizo
 que se albergaran esperanzas de mejorar. A veces, a las pacientes
les parece que no merece la pena vivir, precisamente en unos momentos
 en que deberían sentirse muy alegres.
Irritabilidad
La irritabilidad con frecuencia acompaña a la sensación de tristeza.
La paciente puede estar irritable con sus otros hijos y ocasionalmente
 incluso con el recién nacido, aunque la mayoría de las veces lo está
con su marido quien no suele comprender qué es lo que está pasando.
Fatiga
Todas las nuevas madres se sienten un poco abrumadas y fatigadas,
 pero la madre con depresión postparto se siente tan agotada que llega
 a pensar que padece alguna enfermedad física.
Insomnio
Cuando por fin la madre se va a la cama puede que tenga dificultad
 para conciliar el sueño, o si duerme, puede que se despierte muy pronto,
 incluso aunque su pareja sea quien se ocupe de alimentar al bebé
durante la noche.
Pérdida de apetito
Las madres deprimidas generalmente no tienen ni tiempo ni ganas
 de comer lo cual contribuye a que se sientan malhumoradas y agotadas.
 Algunas madres deprimidas comen en exceso para aliviar su malestar
psicológico y luego se sienten culpables y molestas con su gordura.
Incapacidad para disfrutar
Lo que antes era un placer ahora no apetece y lo que antes interesaba
ahora se convierte en aburrido. Esto es especialmente cierto en el caso
 de las relaciones sexuales. Algunas mujeres recuperan el interés por
el sexo (si es que en algún momento lo perdieron) antes de que
 transcurran 6 semanas del parto, pero las madres con depresión
postparto suelen rechazar cualquier contacto sexual lo cual puede
 generar tensión en la pareja.
Desbordamiento
Las madres con depresión postparto tienen la sensación de no
 disponer de tiempo para nada, de no hacer nada bien y de no poder
hacer nada para remediarlo. A estas pacientes les resulta realmente
difícil el establecer nuevas rutinas para poder hacer frente al bebé y
 a la nueva situación que viven.
Ansiedad
Suele ser aguda y se puede presentar en forma de temor a quedarse
sola con el bebé por miedo a que este grite, no quiera comer, se ahogue,
se caiga o se haga daño de cualquier otra forma.
Algunas madres deprimidas perciben a su bebé como un objeto.
 En vez de sentir que han dado a luz a la criatura más cariñosa y adorable
del mundo se sienten distantes de su hijo, al cual perciben como un pequeño
ser misterioso y extraño, cuyos pensamientos (de tener alguno) son
insondables y cuyas necesidades y emociones deben ser en algún modo
satisfechas. La tarea de la nueva madre deprimida que todavía no se ha
"enamorado" de su hijo es realmente dura. No obstante, el amor surge al
final, cuando el niño es mayor y más interesante.
Sin embargo, la depresión postparto puede desarrollarse aún cuando el amor
por el recién nacido sea intenso. En estos casos, la madre teme
desesperadamente perder a su precioso bebé por no cuidarlo bien, porque
 no se desarrolle adecuadamente, por una infección o bien teme que
muera súbitamente. Un simple catarro puede causar una gran preocupación.
 La madre puede obsesionarse con el peso del bebé y alarmarse si llora
demasiado o incluso si pasa mucho tiempo en silencio, llegando a pensar:
 ¿habrá dejado de respirar?. Es frecuente que la paciente desee ser
 constantemente tranquilizada por su pareja, su familia, su médico o
cualquier otra persona.
La ansiedad también puede hacer a la madre preocuparse por su
 propia salud. Puede sentir pánico cuando su pulso se acelera o si
 tiene alguna palpitación, llegando incluso a pensar que tiene algo
 malo en el corazón o que está al borde de un accidente cerebrovascular.
 En ocasiones se siente tan debilitada que piensa que tiene alguna
 enfermedad terrible y que nunca volverá a tener energía de nuevo.
 Estas sensaciones extrañas e inusuales le harán plantearse la pregunta
¿Me estoy volviendo loca? (La respuesta es NO).
El temor de quedarse sola con todas estas preocupaciones puede dar
 lugar a que incluso la mujer más capaz se sienta tan indefensa que
 no desee que su marido vaya al trabajo.
¿No se sienten todas las mujeres un poco así tras tener un hijo?
Gracias a Dios, no. Muchas mujeres, aproximadamente una de cada dos,
 se sienten un poco llorosas, desanimadas e inseguras en el tercer o cuarto
 día tras el parto. Es el conocido "maternity blues" o depresión del tercer día
 que dura de unas horas a un par de días y que pronto desaparece.
Desde luego, muchas mujeres se sienten cansadas y un poco
desorganizadas cuando regresan a casa del hospital, pero generalmente
 controlan perfectamente la situación cuando pasa más o menos una semana.
 Sin embargo, para las madres con una depresión postparto las cosas
empeoran día tras día.
Cuándo ocurre?
La mayoría de los casos de depresión postparto surgen en el primer mes
 tras el parto, aunque en ocasiones este trastorno puede dar la cara
6 meses más tarde.
Por qué ocurre?
Todavía no sabemos lo suficiente sobre porqué las mujeres desarrollan
 depresiones postparto como para poder estar seguros de quien la
desarrollará y quien no. Probablemente no existe una causa única sino
más bien diferentes tipos de estrés que pueden tener la misma consecuencia
 o que pueden actuar conjuntamente.

Sabemos que entre esos "factores de riesgo" están:
  • una historia previa de depresión (especialmente de
      depresión postparto).
  • una falta de apoyo por parte de la pareja.
  • un bebé prematuro o con cualquier tipo de enfermedad.
  • el que la nueva madre hubiera perdido a su madre cuando era niña.
       una acumulación de acontecimientos vitales adversos, como
       el fallecimiento de un ser querido, la pérdida del empleo de la
       paciente o de su pareja, problemas económicos, problemas de
       vivienda, etc.
Sin embargo, una mujer puede sufrir una depresión postparto sin
 que se aprecie ninguna razón obvia para la misma.

Qué pasa con las hormonas?
Parece probable que la depresión postparto esté relacionada con
los importantes cambios hormonales que tienen lugar en el momento
del nacimiento de su hijo, aunque todavía no dispongamos de
evidencias al respecto. Aunque los niveles de estrógenos,
progesterona y otras hormonas relacionadas con la reproducción
 que pueden afectar a las emociones descienden bruscamente tras
el parto, no se han encontrado diferencias entre las hormonas de
 las madres que desarrollan una depresión postparto y las de las
que no. Una posible explicación es que probablemente algunas
 mujeres puedan ser más sensibles que otras a tales cambios.

¿Maltratan las mujeres con depresión postparto a sus bebés?
No, ellas no lo hacen. Se pueden sentir como si lo fueran a hacer y
se preocupan mucho por la posibilidad de hacer daño a sus hijos,
aunque realmente nunca lo hacen. Para ser honestos, muchas mujeres
 sin depresión postparto han podido llegar a pensar en alguna ocasión
 " Creo que si sigue llorando lo voy a coger y lo voy a lanzar por
 la ventana".
Las mujeres que "golpean" a sus bebés con frecuencia presentan graves
trastornos emocionales que tienen su origen en su infancia.
Raramente, sin embargo, un bebé es herido o incluso asesinado,
constituyendo un infanticidio, por una madre que presenta un trastorno
 mental grave en esos momentos. Esta es una consecuencia trágica
de la llamada "psicosis puerperal", una enfermedad mental muy grave,
 aunque tratable, que puede aparecer a los pocos días del parto.
La madre puede delirar y llegar a pensar que su hijo es el diablo
y por eso tiene que acabar con él, o puede tener ideas suicidas y
decidir acabar no sólo con su vida sino también con la del recién nacido.
La psicosis puerperal ocurre únicamente en uno de cada 500 partos
 y el infanticidio es afortunadamente muy raro.

Qué puede hacerse?
Muchas cosas, pero lo primero desde luego es reconocer y diagnosticar
 la depresión.
Muchas madres deprimidas no son conscientes de que tienen una
enfermedad y se sienten avergonzadas de tener que admitir cómo les
ha afectado su reciente maternidad. Algunas pueden llegar a creer que
si dicen como se sienten realmente puede que les quiten a su hijo
(esto NO ocurrirá). Algunos médicos, enfermeras y trabajadores sociales
están preparados para reconocer la depresión postparto ya que conocen su
existencia y se esfuerzan por detectara, sin embargo, otros profesionales la
pasan por alto o, lo que es peor, la ignoran considerándola como un simple
 "maternity blues".

En la actualidad existe una mayor concienciación para el reconocimiento
 y tratamiento de la depresión en general y la depresión postparto no
debe ser una excepción.
Una vez que se sospecha la presencia de este trastorno, hay que animar
 a la paciente para que exprese como se siente realmente tras el parto
de su hijo. Si manifiesta sentirse triste, desgraciada, irritable, incompetente,
 asustada y desinteresada por el bebé, debe aceptarse esto con una actitud
comprensiva, no con alarma y reproches.
El decirle a la madre que todo lo que le está pasando es consecuencia
de que tiene una enfermedad llamada depresión postparto suele ser de
 gran ayuda, ya que por lo menos sabrá a qué tiene que enfrentarse.
Hay que tranquilizarla e intentar convencerla de que ella no es una
madre caprichosa, extravagante o una mala madre, y de que otras muchas
 personas han padecido y padecen la misma enfermedad.
La depresión postparto es muy frecuente, y si se pone tratamiento sin
 duda mejorará. Hay que advertir a la paciente que el tratamiento
necesitará su tiempo para hacer efecto y que será necesario el concertar
algunas citas para que reciba el apoyo necesario hasta que se recupere.
En este momento es importante el involucrar a la pareja de la paciente
de forma que él pueda comprender qué es lo que ha estado pasando
 (no olvidemos que él también ha estado sufriendo las cosecuencias
de la depresión postparto). Posiblemente él sea quien mejor pueda
apoyar a la paciente, aunque también necesitará algo de apoyo para
 sí mismo, especialmente si es el primer hijo que tiene la pareja y si
 se ha sentido desplazado tras su llegada. Este es un aspecto realmente
 importante ya que si el marido está resentido y no comprende hasta
que punto su esposa necesita de su apoyo y ayuda podrán surgir más
 problemas. El marido de la paciente también se sentirá aliviado por
 el diagnóstico y por recibir consejos sobre cómo actuar. La ayuda
 práctica con el recién nacido, una actitud comprensiva y afectiva
y el ser positivo serán apreciados incluso cuando la depresión
desaparezca.
Qué pasa con el tratamiento hablado?
La oportunidad de poder hablar tranquilamente con un interlocutor
simpático, comprensivo y no crítico, que puede ser un amigo,
un familiar, un profesional o cualquier otra persona, puede significar
una gran ayuda para la paciente.
Los tratamientos psicológicos más especializados tales como la
 psicoterapia (mediante la cual intentará comprender la depresión en
términos de lo que le ocurrió en el pasado) y la terapia cognitiva
 (que intentará hacerle sentir más positivo sobre sí mismo)
constituyen también una gran ayuda y pueden ser solicitadas por
su médico.

Qué pasa con las pastillas?
Los médicos de cabecera no siempre prescriben tratamiento farmacológico
 para sus pacientes con trastornos emocionales. Sin embargo, en ocasiones
 la naturaleza de la depresión es tal que hace necesario un tratamiento con
 fármacos antidepresivos. Estos medicamentos:
.No son tranquilizantes ni estimulantes.
.No son adictivos, no crean dependencia.
.Necesitan dos semanas o más para empezar a hacer efecto.
.No hacen necesario el suspender la lactancia materna ya que
              entre los muchos antidepresivos disponibles existen algunos
        que no pasan a la leche materna y por tanto no afectarán a su
         hijo en absoluto.
.Necesitan ser mantenidos durante al menos 6 meses tras la
             depresión para  reducir el riesgo de recaída.
A muchas mujeres les parece más atractiva la posibilidad de recibir
 tratamiento con hormonas en lugar de con antidepresivos ya que
consideran a éstas más naturales. Sin embargo, las evidencias disponibles
 sobre su eficacia son cuestionables y además no están exentas de
efectos secundarios.
La progesterona parece funcionar mejor en supositorios, mientras
que los estrógenos se aplican actualmente en forma de parches en
la piel. No existe duda de que muchas mujeres creen que el
tratamiento hormonal que han recibido les ha beneficiado, pero
 todavía está por demostrar que este sea algo más que un placebo,
es decir que la curación se produce más por la esperanza puesta en
el tratamiento que por el propio tratamiento en sí.
¿Cuál es el futuro de la depresión postparto si no se trata?
La mayoría de las mujeres suelen mejorar en algún grado al cabo
de semanas, meses o incluso uno o dos años. Sin embargo, esto
 es a costa de un gran sufrimiento injustificado. La depresión
 postparto hace de la maternidad una mala experiencia y dificulta
 la relación entre la pareja. De forma que lo mejor es detectar lo
antes posible este trastorno para tratarlo precozmente.
Puede prevenirse la depresión postparto?
Si. Existen tres formas de prevención: detectar precozmente el trastorno,
 tratarlo rápidamente y evitar sus consecuencias.
RECOMENDACIONES.
  • No intente ser una supermujer. El tener un hijo es un trabajo que
      puede exigir dedicación exclusiva, de forma que durante su
     embarazo intente reducir sus compromisos (si trabaja, asegúrese
     que se alimenta de forma suficiente y con regularidad y ponga
     los pies en alto durante la hora de la comida).
  • No se mude de casa mientras esté embarazada o hasta que su
       hijo no tenga seis meses.
  • Haga amistad con otras parejas que estén esperando un hijo o
      que lo hayan tenido recientemente. Entre otras cosas, esto le
      posibilitará el disponer de alguien que pueda cuidar a su hijo
      cuando lo precise.
  • Identifique a alguien en quien pueda confiar, es necesario
  • disponer de algún amigo a quien acudir en caso de necesidad.
  • Vaya a las clases preparto y lleve a su pareja consigo.
Si ha sufrido previamente una depresión, esto no significa que usted
 vaya a tenerla de nuevo en el siguiente parto. Sin embargo, tras el
parto es necesario que se ponga en contacto con su médico de cabecera
 para que éste vigile la posible aparición de cualquier signo de
recurrencia de la depresión postparto y así comenzar lo antes posible
 con el tratamiento.
Una vez que el bebé haya nacido:
*Aproveche cualquier oportunidad para descansar.
       *Aprenda a echar cabezadas o pequeñas siestas.
         Su pareja podrá encargarse de alimentar al bebé por la noche,
         utilizando si usted lo desea incluso su propia leche extraída
   con anterioridad.
        *Aliméntese adecuadamente. Las ensaladas, los vegetales frescos,
           la fruta, los zumos, la leche y los cereales son alimentos muy
           adecuados para este momento y que además no necesitan de
          mucha cocina.
        *Encuentre tiempo para disfrutar con su pareja. Intente conseguir
          una niñera y salgan juntos a cenar, al cine, a ver unos amigos o
          tomar una copa.
         *Intente intimar con su pareja, incluso aunque todavía no le
           apetezca tener relaciones sexuales completas, un beso, un abrazo,
           una caricia, o un mimo pueden ser bastante reconfortables
           hasta que regrese el deseo sexual al completo.
         *No sea muy crítica consigo misma ni con su pareja. La vida
           se hace bastante dura en estos momentos y el cansancio y la
           irritabilidad de ambos puede conducir a discusiones frecuentes
          que no harán mas que debilitar su relación en unos momentos
          en que esta debería ser más fuerte.
          *No tema pedir ayuda cuando la necesite. Aunque su médico es
           quien debe realizar el diagnóstico de su depresión postparto,
            lo que usted haya aprendido en las clases preparto y en folletos
            como este puede orientarle sobre cuando pedir ayuda.
Finalmente, a pesar de que la depresión postparto ya esté instaurada
cuando se le diagnostique, no se desespere, el apoyo, el consejo y la
 medicación marcarán la diferencia y acelerarán su recuperación.
Nunca es tarde.

Siempre debe consultar a un médico ante cualquier duda
Sobre su salud y antes de comenzar un nuevo tratamiento
con medicamentos, dieta o programa de ejercicio físico.


Que no se les olvide que lo principal en este caso es el apoyo 
de la familia, principalmente del esposo o la persona más cer-
cana a la paciente.



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INFECCIONES DE VIAS URINARIAS

INFECCIONES URINARIAS
Entre el 10% al 15% de las consultas médicas en la población femenina
 son debidas a infección urinaria; el 15% de las mujeres presentan un
episodio de infección del tracto urinario en el trascurso de su vida.
Se ha estimado un incremento de 8% en el número de infecciones
urinarias durante el embarazo.                                              
Preguntas frecuentes:
1.- ¿QUÉ ES Y CÓMO FUNCIONA EL APARATO URINARIO?
2.- ¿QUÉ ES LA INFECCIÓN URINARIA?
3.- ¿QUÉ TIPOS DE INFECCIONES URINARIAS HAY?
4.- CAMBIOS ANATÓMICOS Y FUNCIONALES DEL
     APARATO URINARIO DURANTE EL EMBARAZO.
6.- ¿POR QUÉ ES PELIGROSA LA INFECCIÓN URINARIA
      DURANTE EL EMBARAZO? 
7.- ¿QUÉ ES LA CISTITIS AGUDA?
8.- ¿CUÁLES SON LOS SÍNTOMAS DE LA CISTITIS EN
     LA MUJER?
9.- ¿CÓMO SE DIAGNOSTICA LA CISTITIS AGUDA?         
10.- ¿CÓMO SE TRATA LA CISTITIS AGUDA EN EL EMBARAZO?
11.- ¿QUÉ PUEDO HACER PARA EVITAR LA INFECCIÓN
        URINARIA?


El aparato urinario está compuesto por: los riñones, los uréteres,
la vejiga y la uretra.

Los riñones son órganos pares con forma de fríjol que están
proyectados sobre la región lumbar.
La función de los riñones es filtrar la sangre limpiándola de los
 desechos que el organismo produce en su interior.
Al final de este proceso, los riñones elaboran la orina; líquido
de color ámbar y olor particular.

La orina es recolectada en la pelvis renal y es conducida por
los uréteres hasta la vejiga, donde es almacenada hasta ser
eliminada.
La vejiga es un receptáculo hueco con propiedades contráctiles y
capacidad  limitada.
El conducto de drenaje de la vejiga se llama uretra, a través
de ella la orina es expulsada hacia el exterior.

Normalmente la orina es estéril, o sea, no existe infección en ella.

La infección urinaria hace referencia a la presencia de bacterias
 en la orina.

Se distinguen según su ubicación los siguientes tipos de
infecciones del aparato urinario:
  • Pielonefritis: infección localizada en los riñones.

  • Cistitis: infección que compromete la vejiga.

  • Uretritis: infección localizada en la uretra.


     APARATO URINARIO DURANTE EL EMBARAZO.

1-En las mujeres en embarazo, los riñones incrementan
      su tamaño de 1 a 2 cm.

2-La cantidad de orina filtrada por el riñón se incrementa de
       un 30% a un 50%.
3-Aumento del pH de la orina.

4-Aumento del reflujo de la vejiga al uréter (vesicoureteral).
5-Presencia de glucosa (azúcar) en la orina.

6-Menor “capacidad de defensa” del recubrimiento interno
 (epitelio) del aparato urinario bajo.

7-Incremento de la secreción de estrógenos en la orina.

8-El sistema colector vecino al riñón disminuye sus
   movimientos (peristalsis) por efecto de la progesterona,
   hormona cuya concentración se incrementa durante el
 embarazo, los uréteres se dilatan, se relajan y disminuyen
 sus movimientos (los cambios se inician a partir de la
  semana 8 de la gestación).
9-En la medida en que el útero grávido aumenta de tamaño,
   la vejiga se ve desplazada hacia delante y hacia arriba.

5.- ¿LA INFECCIÓN URINARIA ES MÁS FRECUENTE
      EN LA EMBARAZADA?                   
No, la frecuencia de las infecciones urinarias es similar en la paciente
 embarazada y en la no embarazada; sin embargo, la pielonefritis
es más frecuente en las pacientes gestantes con presencia de bacterias
en la orina (bacteriuria).

6.- ¿POR QUÉ ES PELIGROSA LA INFECCIÓN URINARIA
      DURANTE EL EMBARAZO?          
La presencia de infección urinaria durante el embarazo ha sido asociada con:
  • Parto prematuro.
  • Bebés de bajo peso al nacer.
  • Incremento de la mortalidad en el momento del nacimiento.
  • Elevación de la presión durante la gestación (preeclampsia).
  • Anemia.
  • Infección de la placenta y las membranas fetales (corioanmionitis).
  • Infección materna generalizada (sepsis).


7.-¿QUÉ ES LA CISTITIS AGUDA?
El término hace referencia a la infección que afecta la pared y el
recubrimiento interno de la vejiga. La infección alcanza la vejiga
por vía ascendente, procedente de la zona anal.

8.- ¿CUÁLES SON LOS SÍNTOMAS DE LA CISTITIS EN
     LA MUJER?                                          

Las pacientes con cistitis presentan aumento en la frecuencia urinaria,
 y el volumen expulsado en cada micción es pequeño (polaquiuria).

Hay dolor durante la micción (disuria).

Al terminar la micción, la paciente continúa con la sensación de
tener la vejiga llena (tenesmo vesical).

En ocasiones, puede haber febrícula.

Dolor en la zona púbica.

En la uretritis existe dolor durante la micción en el conducto uretral.

En la pielonefritis se presenta fiebre, mal estado general,
dolor en región lumbar, cefalea, sudoración y escalofrío.

9.- ¿CÓMO SE DIAGNOSTICA LA CISTITIS AGUDA? 
Si en cualquier momento de su embarazo usted presenta ardor
 durante la micción, aumento de la frecuencia urinaria y la sensación
 de tener la vejiga llena, con expulsión de pequeñas cantidades de orina,
usted debe acudir a su médico, posiblemente tenga cistitis aguda.

Su doctor confirmará la presencia o ausencia de infección y recomendará
la práctica de las siguientes pruebas:
  • Análisis de una muestra de orina: consiste en el examen físico y
      químico de una muestra de orina. La presencia de bacterias, conteo
      elevado de glóbulos blancos, presencia de sangre en la muestra
      o nitritos positivos hacen sospechar la presencia de infección.
  • Urocultivo: es el examen de elección, consiste en depositar una
       pequeña cantidad de orina en un medio especial y observar si
       crecen o no crecen bacterias.
En el 90% de los casos la bacteria responsable de la infección es la  
Escherichia coli.

10.- ¿CÓMO SE TRATA LA CISTITIS AGUDA EN EL EMBARAZO?
La infección urinaria debe ser tratada con antibióticos; no todos los
antimicrobianos disponibles se pueden usar durante el embarazo.

Su doctor decidirá cuáles de los medicamentos disponibles son los
más indicados para usted y su bebé.

La duración del tratamiento con la mayoría de los antibióticos oscila
 entre 7 y 10 días, aunque existen productos para administrarse
durante períodos de tiempo más cortos.

11.- ¿QUÉ PUEDO HACER PARA EVITAR LA INFECCIÓN
        URINARIA?                                                                    
1.-Se recomienda a las pacientes:
2.-Tomar líquidos orales.
3.-Vaciar su vejiga frecuentemente.
4.-No retener la orina.
5.-Realizar el aseo de la parte vaginal de adelante hacia
    atrás y no al contrario.

Sí te surgen preguntas no dudes en escribirme tu pregunta, yo 
con gusto te contestaré.





















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No olvide que...


Los médicos no somos dioses, sino instrumentos en las manos de Dios.